El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados y diputado nacional, Agustín Conde, ha asegurado hoy que España “está mejor que hace cuatro años”, debido a la gestión del gobierno del PP en el país. Así, dejó claro que el Estado de Derecho “es más sólido, más fuerte, tiene mejores instrumentos, nuestra economía es mucho más sólida, tiene mejor futuro, y la sociedad española no tiene ya por qué mirar al mañana con temor”.

Por eso, Conde, en un desayuno informativo con periodistas en Toledo, ha avanzado que el PP iniciará una segunda campaña electoral “donde plantearemos a los españoles la necesidad de profundizar en la línea que hemos avanzado”. Indicó que para los miembros del Partido Popular, “ha merecido la pena el esfuerzo hecho durante estos cuatro años, y como diputados y senadores queremos darles a los toledano las gracias por la oportunidad que nos dieron de poder formar parte del Congreso y del Senado y de poder haber servido a España en momentos difíciles en estas dos  importantísimas instituciones”.

El diputado dejó claro que los populares “podemos volver a mirar a los ojos a nuestros electores y decirles que hemos cumplido, que aquello que anunciamos que queríamos hacer está hecho, que las situación de crisis que parecía irresoluble e irremediable se resolvió y se ha visto que tenía remedio”. Apuntó que el PP se encontró una España que se desmoronaba delante de nuestros ojos “sin  nadie hiciera nada por evitarlo, y se paró el derrumbe y comenzamos de nuevo a levantar los muros de nuestro país”.

En este sentido, comentó que hace cuatro años España tenía una cifra de parados inasumible de más de 5 millones, “y además nos encontramos con el que PSOE nos había mentido, que dejó un déficit del 9 por ciento, cuando era un 6 el máximo que permitía la Unión Europea, por lo que los socialistas falsearon las cifra del déficit en tres puntos”, lo que implicaba 30.000 millones de euros de más de déficit de lo que habían confesado en Europa.

Además, España tenía un déficit fiscal de 70.0000 millones de euros, “lo que quiere decir que gastábamos 70.000 millones de euros más de los que ingresábamos”. La sanidad tenía un déficit de 16.000 millones de euros, recordó  Conde, que apuntó que también existía un déficit de la tarifa eléctrica de 26.000 millones de euros, “y que España decrecía. Nos pusimos manos a la obra porque nosotros siempre creímos que España es un gran país que sólo necesita una buena dirección para saber salir adelante”.

El diputado nacional explicó que el gobierno del PP comenzó a tomar medidas; “muchas impopulares, porque naturalmente nos tocaba pedirle a la sociedad española que hiciéramos un sacrificio colectivo, y el PP tuvo claro que sólo entre todos podríamos sacar al país adelante”.

No obstante, aseveró que el gobierno tenía muy claro que “había cosas que no queríamos tocar, porque pensamos que los más débiles no son los que tienen que hacer más sacrificios”. Por eso, una de las líneas rojas que el PP no iba a traspasar era bajar las pensiones. “No íbamos a hacer lo que el PSOE; pedir esfuerzos s a los que no tienen otra posibilidad que cobrar su pensión, y por eso decidimos no bajar las pensiones, sino revalorizarlas conforme lo hiciese el coste de la vida”.

Conde también explicó que las medidas que tomó el gobierno del PP “fue en solitario; no hubo partidos en la oposición que decidiesen arrimar el hombro y echar una mano”, así que todas las medidas las tomamos solos, “conscientes de que era lo bueno para España; lo hicimos en la más absoluta soledad, en la soledad de 186 diputados y 11 millones de españoles que nos respaldaron”.  

En ese sentido, Agustín Conde explicó que el PP ha tomado medidas esenciales como la reforma de la legislación laboral, “que ha sido una pieza fundamental para conseguir que en España se cree empleo y de calidad, porque el 75 por ciento de los trabajos son contratos indefinidos, y somos el segundo país de Europa con más porcentaje de trabajadores indefinidos en su mercado laboral”.

“Los que decían que lo primero que harían seria derogar la reforma laboral, como Pedro Sánchez y el PSOE, hoy ya dicen que no lo derogarían todo, porque es evidente que ha sido una legislación que ha funcionado y que está creando grandes beneficios para España”.