El Partido Popular de Cardiel de los Montes denunció hoy que el alcalde, Adolfo Carretero, se haya puesto un sueldo del Ayuntamiento sin que en los presupuestos haya ninguna partida prevista para el pago del mismo, por lo que tendrá que salir de otras partidas destinadas al conjunto de concejales, según confirmó el propio alcalde socialista en el Pleno Municipal celebrado ayer.
En esa misma sesión plenaria y preguntado por los miembros del Grupo Popular, Carretero aseguró que se ponía un sueldo porque ha hecho muchas cosas por el municipio, algo que desmintieron los concejales del PP, que aclararon que “hasta ahora apenas ha dedicado tiempo al pueblo, que está totalmente abandonado y en el que no se ha hecho nada desde que empezó la legislatura”.
Los concejales del PP lamentaron esta forma dictatorial de gobernar que tiene el alcalde socialista, una actitud que se pone de manifiesto también en la celebración de las sesiones plenarias, que “en su mayoría se convocan en horarios que hagan muy difícil la asistencia de los vecinos y fuera de la Sala de Plenos, en un despacho en el que no pueden entrar más de cuatro personas de público, y se desarrollan sin apenas permitir la intervención de la oposición”.
IRREGULARIDADES EN EL AYUNTAMIENTO DE CARDIEL DE LOS MONTES
Una situación que se repite en cuanto al funcionamiento del Ayuntamiento, donde “las subvenciones de las distintas administraciones se gastan sin respetar la finalidad para la que fueron concedidas y muchas decisiones se toman basándose en el amiguismo y los intereses particulares del alcalde, como ha ocurrido en los últimos tres años en los que las cesiones del bar de la piscina se han hecho sin contrato de arrendamiento y a personas cercanas al primer edil, como el propio teniente de alcalde”.
“Como ha pasado también -criticaron desde el PP local- con la Urbanización Atalaya del Alberche, perteneciente al municipio pero con más residentes que en el propio pueblo, y que arrastra desde hace 30 años un problema en cuanto a los servicios, especialmente en el abastecimiento de agua, a pesar de una sentencia por la que el Ayuntamiento está obligado a notificar a la empresa constructora que acometa las obras necesarias para solucionar el problema, algo que no está interesado en hacer Carretero, que es precisamente el constructor de las casas que se hacen en la urbanización”.
Asimismo, explicaron que el alcalde, como constructor del municipio, “realiza toda clase de obras incumpliendo en la mayoría de los casos la ordenanza municipal, cerrando caminos, construyendo en ellos o no respetando las distancias mínimas entre inmuebles, entre otras irregularidades”.
“Un alcalde déspota que niega un local al grupo de la oposición para atender a los ciudadanos, pese a que el Ayuntamiento cuenta con 850 metros construidos dedicados a dependencias municipales; y que para colmo amenaza verbalmente a quienes no le votaron, diciéndoles que no les va a dar trabajo mientras él dirija el Consistorio”, añadieron.